lunes, 20 de septiembre de 2010

Instantes

¿Será una moda? ¿Será una tendencia? Un hecho único e irrepetible como lo es el ser humano y yo en particular? Sea lo que sea que mi cabeza le ordene a mis dedos y mis dedos le ordenen a mi fiel lapicera bic ustedes se van a enterar tal cual lo están haciendo en este preciso instante.
Este instante, único e irrepetible, que parecería ser especial por eso, pero es justamente aquello que lo distingue de todo lo mismo que lo hace igual a todo. Sí, esa falsa unicidad, mas utópico que el amor verdadero, unicidad que comparte con cualquier otro instante, transformándolo en algo sumamente ordinario. Y en una primera reflexión sobre la vida en sí (que por como pinta la mano no creo sea la única en esta publicación, ni va a ser la última en este blog), es ésta justamente así. La vida, mas vale!. ¿Así? ¿Como es así? Paciencia mi estimado ¿lector?, ¿visitante?
Es una sumatoria de instantes únicos e irrepetibles, instantes hipócritas, pretenciosos. ¿Instantes mágicos? Algunos, los muy menos (o la minoría si queremos hacer un correcto uso de la gramática). Instantes de mierda, sí, y sin signo de pregunta. ¿Capricho del autor o realidad? Si te inclinás mas por el segundo, entonces sos de los míos. Sí!!!
Que cagada estimado lector/visitante. De todos los bandos que había viniste a caer en el mío. Y por algo estás leyendo esto. Lógico, no? Salvo que a mitad del texto me hayas abandonado. Acompañame, dale, dejame ser tu Sergio Lapegüe, prendete conmigo y nunca te apagues, iluminá mis noches y dale calor a mis días... Ay Dios, cuanta melancolía.
¿Será una moda? ¿Será una tendencia? No pido mucho estimado lector/visitante, tan solo un poco de su paciencia. La respuesta al interesante interrogante que planteé antes vendrá mas adelante en alguna otra publicación delirante y no en este preciso instante, hipócrita, pretencioso.